Ser gerente es uno de los objetivos de todo ejecutivo y es el primer cargo que desempeña un emprendedor, y ambos casos tienen algo en común, ninguno de los dos ha sido preparado para llegar a serlo. En el primer caso, se llega por un desempeño sobresaliente y la percepción de sus jefes de la capacidad que posee la persona para desempeñarse como tal. En el segundo se llaga por las ansias de emprender un negocio y como generalmente no hay recursos para pagar un gerente, automáticamente el emprendedor es nombrado gerente de su propio emprendimiento.
Es por esto que la preparación de un gerente debe ser reforzada con una capacitación permanente que le permita desarrollar sus conocimientos, competencias y habilidades, tanto a nivel conceptual como practico, que le permitan actuar con propiedad en su cargo y a su vez logre con base en estos elementos, obtener lo mejor de sus empleados.