Hoshin significa brújula y Kanri control, es decir controlar la dirección. Permite integrar todas la actividades que se desarrollan en la empresa, enfocándolas a objetivos específicos, ajustándolos a cambios, para lograr metas clave.
Su filosofía radica en aceptar que todas las organizaciones en su interior poseen fuerzas que obedecen a intereses diferentes por los cual se enfocan en diferentes direcciones, incluso enfrentándose entre ellas. El reto es lograr que estas se enfoquen en una misma dirección, para lograr las metas clave planteadas.
Su desarrollo y aplicación fue tan importante que llego a ser parte de la famosa teoría Japonesa llamada: Total Quality Management.
Tres objetivos principales posee este modelo:
Orientar a todos los empleados a objetivos clave, utilizando medios indirectos de motivación, creando necesidad y creencia en ellos.
Integrar tares en función de objetivos clave, coordinando esfuerzos y recursos.
Ajustar actividades y objetivos en función de cambios del entorno.